jueves, 19 de julio de 2012

LUMBALGIA : Un problema , muchas causas.

La Zona lumbar es un área muy vulnerable de nuestro cuerpo, está constantemente sometida a movimientos, esfuerzos, malas posturas, defectos hereditarios, sobrecarga de peso; por esto es muy probable que en algún momento de nuestra vida aparezca dolor en esta área del cuerpo delimitada por las 5 vertebras lumbares con sus respectivos discos intervertebrales y su musculatura adyacente, es precisamente a esto lo que llamamos LUMBALGIA . Entre un 80% y un 90% de las lumbalgias son autolimitables (se quitan solas) y se deben a problemas funcionales ocasionados por la mecánica alterada del movimiento, o bien sea por la falta de este, como en el caso de los pacientes que son encamados por largos periodos. Solo entre un 10% o un 20 % de las lumbalgias se deben a una causa patológica estructural (Hernia discal, Metástasis por cáncer en la vertebra, Fracturas por aplastamiento vertebral, etc), hay otros tipos de dolores que son asociados con lumbalgia y que realmente son patologías que necesitan atención inmediata, como por ejemplo el dolor por una Litiasis Renal (piedras en el tracto urinario) , los Aneurismas de la aorta abdominal cuando se están disecando pueden simular una lumbalgia y dar al traste con una mega hemorragia que termina con la vida del paciente. Existen factores de riesgos que predisponen a sufrir de problemas en la espalda que desencadenan en algún momento una lumbalgia como los son la obesidad, los vicios de postura incorrecta, los ejercicios físicos mal guiados, los gestos repetitivos de flexión y extensión , la exposición frecuente a vibraciones, la vida sedentaria, historia previa de accidentes de tránsito , las escoliosis , el tratamiento con corticoesteroides prolongado, problemas psicológicos, alcohol, tabaco , drogas, estrés e insatisfacción en el trabajo así como los embarazos y los periodos de encamamiento prolongado. Tratar la lumbalgia es todo un reto, envuelve una mezcla de sentido común y de conocimiento medico para poder hacerle frente, es importante conocer antes de tratarla, cual es la causa o motivo que la desencadena. En algunas ocasiones son más de una las causas del dolor en la espalda y a veces también existen informaciones confusas que pueden hacer desviar el diagnostico. Es importante entender que no se debe hacer un diagnostico solo basado en una imagen de diagnostico (resonancia, tomografía o radiografia) pues “no todo lo que se ve es lo que en realidad duele” y de aquí la importancia de encontrar un medico con un fino examen físico para poder resolver este acertijo. Los tratamientos modernos nos guian a la mezcla de fármacos, con ejercicios preventivos asi como la educación sobre la postura, también existen medios físicos que nos ayudan a aliviar las crisis de dolor, todos y cada uno de ellos pueden ser usados con efectividad siempre y cuando la orientación diagnostica sea acertada. Si le duele la espalda busque un buen médico que haga el diagnostico correcto y no pierda tiempo en prologar el mal con alternativas a ciegas. “El mal a tiempo tiene remedio”.